*El afluente es uno de los más peligrosos del país.
Agencia Costa Sur/ Dorian Scott Vázquez.
Agencia Costa Sur/ Dorian Scott Vázquez.
Suchiate, Chiapas. 24 de
Octubre. Aún cuando las autoridades de Protección Civil estatales y locales han
determinado un elevado el riesgo en esta temporada de lluvia en el Río Suchiate
debido a las fuertes corrientes por la creciente de su nivel normal, cientos de
balseros y personas que utilizan ese servicio toman el riesgo omitiendo las
recomendaciones de prevención.
Diariamente, los balseros,
jóvenes y adultos mayores, prestan el servicio desde la parte de Guatemala y
México para cruzar a cientos de personas de los dos países que van y vienen en
un hábito comercial de consumo basado en la oferta y demanda de productos de
toda clase.
La actividad comercial,
obliga a que se ocupe está modalidad de traslado que opera fuera de orden de
alguna autoridad y que no cuenta con garantías de seguridad para los ocupantes
que la pericia incalculable del conductor de la balsa.
En el recorrido hecho por el
reportero en la rivera del río Suchiate, el cual ante las fuertes lluvias de la
parte guatemalteca y en el límite fronterizo de los municipios del soconusco,
ha aumentado su nivel, se percibe el esfuerzo doble que realizan los
conductores para atravesar el río, donde en cualquier momento podrían sufrir un
accidente mortal.
Y es que hay quienes
aseguran que están conscientes del riesgo, y sin embargo admiten que es una
mejor forma de pasar la mercancía, “la verdad sé que es un riesgo por que la
corriente del río es muy fuerte pero es la única forma de poder pasar mi
producto evitando el puente fronterizo y a la autoridad de las aduanas por que
ellos nos quitan la mercancía o en el mejor de los casos no nos la dejan pasar,
por eso tenemos que utilizar a los balseros”, señaló Ana María, una comerciante
de abarrotes que se abastece de este lado del río, en Ciudad Hidalgo y que
realiza en promedio 2 viajes a la semana.
Los comerciantes cargan del
lado mexicano sus productos en las balsas, abarrotes en general en su mayoría,
huevos, pastas, enlatados, refrescos embotellados, dulces, arroz, y en algunas
ocasiones trasladan comúnmente gasolina, los cuales son atravesados por el río
llevando el resguardo del ocupante y del balsero.
Esa práctica es un elevado
riesgo debido a que ellos mismos admiten que en caso de alguna ponchadura o
volcadura de la balsa, la mercancía se perdería y en algún momento del
accidente, los ocupantes de la balsa podrían irremediablemente ser arrastrados
por el río.
Miguel, es un balsero
originario de Malacatán San Marcos, que realiza la actividad desde hace 3 años
y que comenta que la situación es muy difícil actualmente debido a que las
tarifas de cobro van desde los 5, 10 o hasta 15 quetzales cuando se pasa a la
gente de “Guate” a Suchiate y cuando algún mexicano va para el otro lado se le
pueden cobrar hasta 20 pesos y a l gente que ocupa los servicios de forma
seguida pues ya tienen una tarifa.
El balsero, con el rostro
quemado por el sol y un semblante de de despreocupación, admite que en esta época
el riesgo por la actividad de pasar y llevar gente a lo largo y ancho del
Suchiate es un riesgo mayor por las fuertes corrientes y las crecidas del río.
“de por sí el Suchiate es
peligroso, eso lo sabemos y cuando llueve muy fuerte en la zona alta de Guatemala
o aquí en el municipio la corriente es muy fuerte y el peligro aumente, pero
nosotros tenemos que hacer el trabajo no podemos hacer otra cosa, de aquí
vivimos, de aquí comemos”, señaló al admitir que el día está flojo.
Aproximadamente a decir de algunos
de los balseros que accedieron a comentar con la condición de no ser grabados,
existen alrededor de 500 personas dedicadas a esta actividad los cuales están
agrupados para darse apoyo continuo, y sin embargo la reacción en caso de un
percance sería tardía de darse en condiciones donde el río pudiera estar
crecido.
Protección Civil, reconoció
que el Río Suchiate es uno de los más peligrosos y a pesar del riesgo la
actividad de los Balseros en esta frontera sur no se detiene, por el contrario,
aumenta ante el incesante paso de mercancías de todo tipo en la frontera más
porosa de México. (COSTA SUR).
Comentarios
Publicar un comentario